4.3.12 in

CAMINO AL ADIOS

El primer dia toqué el cielo
sintiéndome el Rey de lo creado,
junto a unos ojos que me miraban
tratando de descubrir todo aquello
que guardaba celoso en mi interior.
La tardes dieron paso a las noches
cuando entre suspiros, dos almas hicieron una,
que se robaron una canción, un beso,
un calor, una emoción, un todo,
en el que según pasaban los minutos
unían eternas las mentes en ansiada agonía.
Pero el tiempo se agota y todo aquello
que hace unas horas era felicidad
ahora se transforma en ausencia.
Lo que pareció ser importante, no es nada,
sólo vacío, inexistencia plena... quizás...
... sólo un deseo por lo desconocido
cuyo camino caía en el mero juego
de un retorcido y negro destino escrito.
La ausencia pasó a desgana, y la sonrisa
se tornó miedo y sombría desconfianza.
Hasta que el último dia, sin poder retornar.
El fin machaca el ánimo sin darle tregua,
saliendo de mi boca palabras que en un pasado
juré  jamás volver a repetir.
La soledad es ocre, mi yo es gris
y en cambio tu, tan sólo un azul pintado
que con el cielo se me confundió
desapareciendo cuando llega la noche.
De nuevo, otra vez, se repite el ciclo
pero esta vez, será ya para siempre sin ti.